Como individuos que formamos parte de la sociedad es evidente darse cuenta que nuestra capacidad de hacer cosas es mejor como grupo que como individuos. Como seres humanos, no tanto nuestra inteligencia, sino nuestra capacidad de aprender colectivamente es lo que nos hace realmente especiales. Esa capacidad para transmitir información entre nosotros y de dejar conocimientos que puedan perdurar más que nosotros y que puedan ser desarrollados por otras personas es lo que ha hecho que podamos aprender tantas cosas como humanidad.
A pesar de esto, cuando uno aprende cosas o estudia algo lo hace de forma individual y cuando uno llega a pedir ayuda a otra persona generalmente esto termina en un intercambio de información entre dos personas. Esto es como normalmente he aprendido cosas durante mi vida, incluso actualmente, leyendo libros, viendo videos de YouTube y otras cosas más. En otras palabras, he sido principalmente un consumidor de información y de aprendizaje.
No solo ser consumidor
Hace relativamente poco tiempo comencé a subir información a internet y esto comenzó con un objetivo simple, evitar repetirme a mí mismo cuando explicaba cosas a diferentes personas. Por ejemplo, al subir un video a internet explicando algo puedo compartir el video a alguien más y evitar gastar tiempo repitiendo esa explicación. Con el tiempo, sin embargo, descubrí de casualidad que había personas que encontraban esa información valiosa también y así continué generando contenido para otras personas.
Ahora, pasado ya cierto tiempo, creo que mi forma de pensar sobre algunas cosas ha cambiado. Por ejemplo, mi concepto de mí mismo como consumidor ha cambiado un poco y creo que podría ser también un “creador” de información, aunque sería más como un distribuidor de información. Un ejemplo práctico de este cambio es que tengo la idea de que los apuntes o cosas que son valiosas para mí podrían ser valiosas también para los demás y por este motivo ahora intento hacer públicas esas cosas, en la medida de lo posible.
Esta forma de pensar hace que ahora tome diferentes decisiones respecto a mi forma de aprender las cosas, en primer lugar me fuerza a preocuparme más en aprender las cosas bien, para ser capaz de compartirlas o enseñarlas de una mejor manera y con mayor seguridad. Además, me permite ser consumidor del propio contenido que genero. El consumir mi propio y sentirme cómodo con hacerlo me permite volverme a asegurar que mi información es valiosa para mí e indica que esta puede ser accedida de una forma adecuada.
Aprendiendo juntos
Realmente estoy en pañales en cuanto a esto de generar información, dar mi opinión y abrirme a los demás en general. Actualmente estoy intentando expresar algunas de mis ideas, resumir algunas cosas que aprendo, tomar algunos apuntes de libros u otros recursos, entre otros. Lógicamente no soy un experto en nada y la verdad eso me hace pensar a veces que no tengo la licencia de hablar sobre temas que no domino aún. Sin embargo, creo que compartir mi proceso de aprendizaje es parte de integrar mi aprendizaje con el aprendizaje de los demás, con el aprendizaje de grupo y tal vez pueda conseguir compañeros que aprendan conmigo, incluso sin conocernos.
Cada persona tiene distintas perspectivas, opiniones, ideas y fomentar el intercambio de información y la discusión nos permite poder aprender juntos. Actualmente esta es mi forma de pensar y estoy actuando de acuerdo a esto, es posible que en el futuro continúe aprendiendo más cosas y poder hacer las cosas mejor. Por ahora estoy disfrutando de la oportunidad de compartir cosas también y sentirme un miembro activo de una comunidad que aprende cada vez más todo el tiempo.